Su abuelo, Otto Horcher, fundó un restaurante que ha trascendido el hecho de servir buenos platos, que se ha mantenido a lo largo de los años y que, sumando esto y mucho más, se ha convertido en un lugar histórico. Ante sus mesas se han reunido, y siguen haciéndolo, relevantes personalidades del ámbito de la política, la economía y el arte.

Hoy, es Elisabeth, cuarta generación, quien imprime una exquisita elegancia a Horcher. Porque el tiempo pasa y para mantenerse entre las mesas del poder es preciso bordar el trabajo en cada servicio. Hablamos de alta gastronomía pero también de atmósfera delicada y pequeños grandes matices. Ésa es la diferencia. 

Asegura que todo acerca del negocio lo ha aprendido de su padre, Gustav. Durante los meses de otoño y de invierno, en la carta reina la caza con clásicos como la perdiz a la prensa, la becada, el lomo de corzo o el ganso. 

Museo y un pintor/escultor/fotógrafo/artista:
Sorolla, Calder, Cartier-Bresson y Claudia Alvarado.

Película:
El fuego de la venganza, dirigida por Tony Scott y protagonizada por Denzel Washington

Libro:
24 horas en la vida de una mujer, de Stefan Zweig.

Canción, un disco:
Harvest Moon de Neil Young.

El plan perfecto:
Tengo muchos. Por ejemplo, un desayuno eterno en casa con mi familia. Irme de  viaje con mi marido. Estar de charleta con mis amigas… ¡Hay tantos!

En su frigorífico/despensa siempre hay:
Chocolate negro y vino tinto.

El restaurante que no falla:
En verano, el restaurante de Marbella Club. La terraza es inigualable a ningún otro sitio, recuerda a la Marbella de antes.

La bebida:
SIEMPRE vino tinto y, en verano, rosado.

Un cóctel (y con qué ingredientes):
No tomo cocktails, sólo vino. Como mucho una piña colada de las de verdad.

Una ciudad:
Madrid.

Un hotel:
One&Only Palmilla en los Cabos. Ojalá pueda volver.

Un rincón (secreto) para desconectar:
Menorca.

El viaje pendiente:
Australia y Japón.

Un perfume:
Shiso de Roger & Gallet.

El cosmético de tratamiento:
Los serums de iS Clinical.

Una rutina de cuidados:
Comer bien, moverse y ser positivo.

Un truco que nunca falla:
Pocos trucos me sé la verdad. Lo que nunca falla es tener confianza en uno mismo.

¿Cómo define su estilo?
Nada definido, me gusta probar y mezclar.

Última adquisición:
Muebles para casa, nos acabamos de mudar.

Un complemento imprescindible:
Siempre llevo una pulsera que me regaló mi madre.

La marca a la que es fiel:
Kika Vargas, mi diseñadora favorita.

Último regalo recibido:
Un anillo.

Último regalo que ha hecho:
Un viaje.

¿Qué locura(s) se permite?:
Más que locura es un lujo, el de hacer lo que me gusta.

Un capricho reciente:
Un fin de semana.